sábado, 1 de septiembre de 2007

Necesidad


La ausencia corroe mi alma

me impacienta por completo,

y me hace pensar cada vez más

en tu imagen, tus besos,

tu olor, en tu ser por completo.


Necesito que tus manos recorran mi cuerpo,

Necesito oir tus palabras dulces,

Necesito del abrazo diario y del beso sublime.


Y esta noche fria me hace desear

con más ansias tu calor

me hace añorar tu lengua

y angustiarme por el roce de tu cuerpo.


Cuanto daría porque estuvieses ahora

aquí junto a mi...

que no daría por respirar de tu aliento,

cubrirme de tu sudor y acabar una y mil veces,

sin dejar de besarte, sin parar de tocarte.


Y solo pensar en tu presencia,

me hace sentir vulnerable

a los bajos instintos que todos poseemos.

Solo recordar aquellos momentos,

me hace sentir una atmósfera ténue,

insípida, inhocua, incolora e inolora...

para los cinco sentidos, pero no así para el corazón

donde en profundidad puedo apreciar la energía que circunda

con el solo hecho de pensar en ti.


En realidad daría todo porque ahora estuvieras aquí.



No hay comentarios: